Desalmado.
Sentado frente al atardecer mirando la vida pasar.
Observando las mil caras del espacio-tiempo,
el sutil movimiento de un universo infinito…
Sin fe.
Un secreto escondido entre los pliegues del corazón.
El cuerpo cansado, la mente hiperactiva.
Y los sueños reflejados en las pupilas despiertas…
Sereno.
Una parte del todo, un Todo en sí mismo.
Está programado: desde la esencia de lo que somos,
hasta la meta a la que debemos llegar…
domingo, agosto 31, 2008
Parabola
lunes, agosto 11, 2008
martes, agosto 05, 2008
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